Confiar en él.
No existe nada más efectivo para crear
responsabilidad que la confianza. Si el adolescente piensa que confiamos en él
procurará comportarse con lo que se ha comprometido. Aunque no es preciso que sea
una confianza ciega, no somos psicologos,
somos sus padres, sabemos dónde fallan, así que estaremos atentos a ello pero
sin agobiarlos.
En la misma línea, es de importancia
que tengamos claro que somos los encargados de guíarlos, pero sin desempeñar un control
asfixiante que mine la confianza en sí mismos.
Respeta sus decisiones y
opiniones.
Es importante además, para que adquiera
confianza en sí mismo, que respetes lo que piensa y sus decisiones. Siendo
sabedor, que eso no quiere decir que siempre estés de acuerdo con esas
decisiones y opiniones. De todas formas, si precisas de un poco de ayuda, consulta
a profesionales como http://psicologosmadrid.info/ , donde encontrarás esa
ayuda, para que no desesperes en tu responsabilidad.
Enséñale que todas las decisiones
tienen consecuencias.
Cuanto más rápido comprendan eso los
adolescentes y lo interioricen, entrarán en la vida adulta con más confianza.
Desde adolescentes, chicos y chicas deben entender que todo tiene sus
consecuencias y admitir el evaluar cuáles serán las de las decisiones que tengan
en cada momento.
Asegúrate de que las normas están
claras para él o ella.
Algunas ocasiones, los padres y madres
se quejan de falta de disciplina o responsabilidad de sus hijos, pero
lo único que pasa es que estos no han entendido bien, cuáles son las normas que
deben cumplir. Por eso es de importancia asegurar, de que estas estén siempre
muy claras.