miércoles, 22 de octubre de 2014

Carteles y rotulos de publicidad exterior


Pasados los años el término de publicidad exterior, al ir avanzando, ha sustituido al vocablo más común de, publicidad de exteriores. Este cambio implica más que una normal modificación a la terminología. Da a conocer, la diversificación de la industria y de su estrategia mercadotécnica. Quienes se dedican a la publicidad exterior están introduciendo sistemas muy variados, consiguiendo la identificación con mejor precisión de los integrantes de su mercado, y además aumentando el número de anunciantes que se habían conseguido en los años precedentes. La publicidad exterior, le da a los anunciantes diversas técnicas para incrementar sus medios primarios, especialmente cuando se introducen nuevos pro­ductos, o cuando se quiere obtener un gran reconocimiento de productos que ya se encuentran en el mercado.

La publicidad exterior, no solamente es la manera de publicidad más antigua, sino también la que más sobre comunicación de masas. Las pinturas en los muros de las tumbas y las tablas de arcilla con rotulos para el público, son de la época del Antiguo Imperio Egipcio, de hace 5000 años. En épocas más próximas, los simbolismos de las tabernas en la Inglaterra del siglo XV, valían como puntos de referencia, a la vez que informaban sobre el aloja­miento a los cansados viajeros que, con bastante frecuencia eran analfabetos. Los inicios del cartel exterior, se pueden rastrear hasta la perfección del pro­ceso litográfico en 1796, fecha en que los carteles empezaron a ser una manera de propaganda política y de publicidad muy popular. Los carteles, fueron em­pleados de forma muy amplia, por los colonizadores de los territorios de  EE.UU. durante la Guerra de Sucesión, y pintores como Manet y Toulouse-Lautrec realizaron encargos para la promoción de exteriores en la Francia del siglo XIX.