Hasta en las mejores hipotecas, la aplicación de la
bajada depende además de la modalidad de crédito hipotecario que se hubiese
contratado. Los intereses son revisados de manera mensual, trimestral,
semestral o anual. Por eso, cuando los tipos de interés de la hipoteca bajen,
habrá que esperar también a que llegue el momento de la revisión. El día de la
revisión, se tomará el último tipo aprobado por España, que pudiera ser el que
tuvo lugar dos o tres meses atrás; en el caso de las revisiones semestrales y
anuales, se pueden lógicamente contemplar incluso periodos más largos.
Quien no conozca, la fecha y periodicidad de
revisión del tipo de interés variable, puede consultarlo en la escritura de su
hipoteca. Si no está explícita, se deberá comprobar la fecha de compromiso. También,
debemos tener en cuenta cómo son las condiciones de la revisión: el mes antes de
la fecha de revisión o por meses antes, aunque como norma está contemplada en
el mes precedente.
El hipotecado, puede
averiguar de una forma muy sencilla, y en sólo tres pasos, cuándo le corresponderá
la próxima revisión:
*Viendo qué interés le están
aplicando en los recibos actuales.
*Restándole más tarde el
diferencial, lo que le dará el valor del índice de referencia europeo de un mes
en concreto.
*Buscando este valor, en la
tabla de los meses para conocer realmente de qué mes se trató, ya que éste fue
el de la última revisión. Una vez conseguido, se correrá tres meses, seis o un
año (en función del tipo de revisión), y de esta manera podemos saber cual es
el mes de la próxima revisión.