lunes, 2 de enero de 2017

Muebles de segunda mano de lineas vintage

Como especialistas en muebles de segunda mano, hemos detectado que la tendencia 'vintage' ha conquistado las necesidades de los hogares actuales, que se dotan de muebles únicos de hace cuarenta o cincuenta años y que solo pueden encontrarse en tiendas de segunda mano. La decoración y el interiorismo, cada vez son más esenciales en nuestra sociedad, de forma que los hogares y sus dueños procuran ocasiones de ser únicos en las piezas que escogen para el interior de sus casas y no quedar inmersos en un mundo homogéneo colonizado por las grandes cadenas de muebles internacionales.

 

 Son piezas únicas, que aportan un toque complejo y a la moda a tu hogar y que, sobre todo, no se hallan en secuencias y repetidas como un bucle en todas y cada una de las casas de tus amigos, como ha venido sucediendo en los últimos tiempos a causa de la expansión de dichas cadenas internacionales. La tendencia 'vintage' ha llegado para poner antídoto a estas situaciones, y lo ha hecho con mucha fuerza.


Lámparas viejas de araña, sofás con un aire absolutamente retro, sillas bien trabajadas... Un cosmos de objetos que anteriormente costaron grandes sumas a sus dueños, se extienden en nuestros días en tiendas de artículos de segunda mano, y puedes localizarlos a un coste muy accesible y con el asesoramiento de buenos profesionales.

Visitar en una página web una tienda de muebles segunda mano, y un poco de imaginación por tu parte, puede servirte para decorar tu casa por poquísimo dinero, reconvirtiendo muebles viejos que otras personas han dado por inútiles. Asimismo Internet puede ser tu gran aliado por el hecho de que puedes continuar el pasito a pasito de multitud de proyectos o bien localizar ideas que funcionan y aplicarlas a los tuyos.

La inspiración puede venir de donde menos te lo esperas: imagina ese aparador que miras, en tu dormitorio. Forrando los cajones con papel, pintándolos de un color atractivo, cambiándole las patas… Hay un sinfín de posibilidades que puedes efectuar a través del reciclaje creativo.

Seguro que en alguna tienda de muebles de segunda mano encuentras una vieja nevera. Aun es posible que ni tan siquiera funcione: con una buena capa de pintura puedes transformarla en una original vitrina librería. 

No te limites a la pintura y al barniz. Forrando todo el mueble o bien partes de él con papel (de paredes, de cómics, de regalo, de periódicos…) puedes conseguir resultados muy originales. Tan originales tal y como si coges un viejo sillón de orejas, le quitas las patas y le enganchas unas cuerdas gruesas que te dejen colgarlo del techo (pregunta en la ferretería por ganchos para colgar hamacas). Cuando acabes de montarlo, seguro que todo el mudo deseará probarlo.

El simple hecho de intentar salvar un mueble, la actitud misma de procurarle una funcionalidad o bien de apostar por una renovación que lo revalorice en lo estético e inclusive como producto de reventa es un paso definitivo. No únicamente por el dineral que puedes ahorrarte, sino más bien por el tiempo que pasarás haciendo una actividad que puede ser muy entretenida.