Conforme la edad, hay diferentes beneficios, pero con toda la
información reunida, te he resumido siete razones por las que pueden montar a caballo niños/as:
Montar a caballo, ofrece el desarrollo de
sensaciones que no se pueden probar en ningún otro deporte, ni de ninguna otra
forma.
A fin de que te hagas una idea, sólo con el movimiento del trote, se mueven más de cien músculos al unísono. Y las sensaciones del galope, o bien del salto, son aún mucho más distintas y potentes.
A fin de que te hagas una idea, sólo con el movimiento del trote, se mueven más de cien músculos al unísono. Y las sensaciones del galope, o bien del salto, son aún mucho más distintas y potentes.
A fin de que te hagas una idea, sólo con el
movimiento del trote, se mueven más de cien músculos al unísono. Y las
sensaciones del galope, o bien del salto, son aún mucho más distintas y
potentes.
Es tan poderoso este estímulo, que en un
instante de desarrollo tan esencial como es el primer septenio de vida, se
crean una serie de conexiones neurológicas, una huella, que no se puede volver
a probar igual en otro instante evolutivo.
De ahí, que todos y cada uno de los pequeños, deberían tener la ocasión de experimentarlo, de probarlo, con independencia de su situación física y de si después desarrollan afición por la equitación o bien no. Pero es un punto de comienzo para alentar y desarrollar un montón de destrezas.
De ahí, que todos y cada uno de los pequeños, deberían tener la ocasión de experimentarlo, de probarlo, con independencia de su situación física y de si después desarrollan afición por la equitación o bien no. Pero es un punto de comienzo para alentar y desarrollar un montón de destrezas.
Montar a caballo mejora la autoconfianza, la autoestima, la empatía y se desarrolla un sentido de libertad
El contacto con el animal da autonomía, además de esto ayuda a superar miedos y obstáculos, lo que provoca una enorme satisfacción personal que eleva la autoestima y equilibra el comportamiento.
Montar ayuda a mantener la calma
Una investigación de la universidad de Washington, ha probado que los pequeños y adolescentes que tienen la ocasión de estar en contacto con caballos, tienen la hormona cortisol (del agobio) considerablemente más baja que el resto. Son niños/as más calmados, que interpretan mejor los factores agobiantes. No se alteran tan fácilmente y esto en un futuro les evitará de padecer ansiedad o bien depresión.
Una investigación de la universidad de Washington, ha probado que los pequeños y adolescentes que tienen la ocasión de estar en contacto con caballos, tienen la hormona cortisol (del agobio) considerablemente más baja que el resto. Son niños/as más calmados, que interpretan mejor los factores agobiantes. No se alteran tan fácilmente y esto en un futuro les evitará de padecer ansiedad o bien depresión.
Montar a caballo mejora las habilidades sociales y de liderazgo
Como suelen hacerse clases grupales con otros pequeños, se
crea una clase de simbiosis en las que uno está pendiente del otro, es un
deporte social.
Ahora, pueden
montar a caballo niños de muy corta edad compartiendo las clases con sus
familiares adultos y bajo el seguimiento del profesor de equitación
Enseña responsabilidad al montar a caballo
Como te he comentado antes, los pequeños aprenden sobre el
cuidado y el aseo del caballo, la manipulación y la interacción con él, de
forma que cultivan esa responsabilidad, que después puede extenderse cara a otros
aspectos de su vida.
El caballo te conecta con el aquí y el ahora
El caballo te conecta con el aquí y el ahora
Los especialistas, están conformes en que hay algo en la
energía de estos animales, en su mirada suave, que cambia a las personas. Por
su conectividad y proximidad, los caballos te conectan con el instante
presente, con el aquí y el ahora, incrementando el nivel de consciencia. Es una
cualidad mágica y emocionante que tienen. ¡Y muy precisa!
Montar a caballo es muy saludable y te contacta
con la naturaleza
Ahora, pueden montar acaballo niños pues se trata de una actividad amena muy saludable, que les
ayuda a mantenerse sanos y activos. Además de esto, deja hacer ejercicio al
aire libre, en contacto con la naturaleza. Y físicamente, mejora el equilibrio
y la coordinación.
Si bien no soy muy entusiasta de las actividades extraescolares para los pequeños, puesto que considero que al final se transforman en una obligación y una prolongación de la escuela, esta actividad, como la psicomotricidad vivencial, sí que la aconsejo mucho. Creo que es una ocasión increíble, a fin de que nuestros hijos experimenten unas sensaciones únicas, permitiéndoles crear conexiones profundas y naturales con ellos mismos, gracias al contacto con los caballos.
Si bien no soy muy entusiasta de las actividades extraescolares para los pequeños, puesto que considero que al final se transforman en una obligación y una prolongación de la escuela, esta actividad, como la psicomotricidad vivencial, sí que la aconsejo mucho. Creo que es una ocasión increíble, a fin de que nuestros hijos experimenten unas sensaciones únicas, permitiéndoles crear conexiones profundas y naturales con ellos mismos, gracias al contacto con los caballos.